En la actualidad, dentro de los estilos de decoración más de moda, convivimos con numerosos estilos de decoración. Normalmente, estos suelen estar basados en una conjunción de lo viejo con lo nuevo o lo moderno, ya que si bien está de moda lo vintage (muebles antiguos, restaurados o no) también hay una creciente demanda en el mobiliario de aspecto más contemporáneo de líneas simples.
Hoy están arrasando gran variedad de estilos de decoración, por lo que es difícil decantarse por uno. La demanda del estilo nórdico, el minimalista, el industrial y el rústico moderno a decoradores de interiores está creciendo de forma considerable y los sitúa entre los más deseados:
El estilo nórdico es de los más empleados dentro de los estilos de decoración más de moda.
Este estilo surge en la década de los cincuenta en los países escandinavos y está influenciado por las condiciones climáticas adversas que predominan allí. Para pintar nuestra casa con este estilo decorativo podemos comprar pintura chalk paint de tonos claros, sobre todo de blanco, porque el fin principal es que se refleje mejor la luz natural, tan apreciada en estos países. Además, una buena iluminación natural siempre dará mayor sensación de amplitud en las habitaciones. Un dato curioso de este estilo es que rechaza la presencia de cortinas y persianas porque impide que entre bien la luz.
Por otro lado, el mobiliario suele ser sencillo y de colores blancos, grisáceos, beige. El material estrella es la madera, sobre todo de tonalidades claras. Esta también está presente en marcos de fotos, lámparas y otros elementos de la casa.
El estilo minimalista: un clásico en la decoración.
Este nace en los 60 en Estados Unidos y alcanza su auge en los 70 en Europa. Se caracteriza, sobre todo, por simplificar los elementos de las habitaciones. Su filosofía “menos es más” pretende reducir la presencia de mobiliario a lo estrictamente funcional y esencial para dar sensación de amplitud a la casa.
El mobiliario normalmente es del mismo color que las paredes porque así la sensación de armonía es mucho mayor. Destacan los colores claros y los materiales de madera, acero y cristal. Los acabados de los muebles son sencillos, con aspecto rectilíneo y también son funcionales, es decir, son siempre fáciles de limpiar.
Creando tendencia con el estilo rústico moderno
Este estilo, al contrario de los anteriores, pretende que la naturaleza se inserte en el espacio del hogar a través de la inclusión de materiales como la madera, la piedra, el mimbre o la cerámica, típicos de los entornos rurales de toda la vida.
En el mobiliario encontramos una mezcla de muebles más antiguos y otros más modernos. Destaca la reutilización de muebles antiguos: si se encuentran en mal estado se limpian y se lijan y se les aplica una capa de pintura, por ejemplo podemos comprar pintura chalk paint. Las paredes suelen tener tonos blancos y realzan las tonalidades más cálidas del mobiliario a través del contraste cromático.
El estilo industrial: otro estilo atemporal
El estilo industrial surge en la década de los cincuenta en la ciudad de Nueva York cuando mucha gente se instala en grandes fábricas y naves industriales abandonadas. Por eso se ha mantenido la presencia de vigas y de ladrillos de estas antiguas fábricas en las viviendas con este estilo, que realza su origen de carácter industrial.
Otra de las influencias del estilo industrial es la de los famosos lofts, donde encontramos grandes ventanales que dan a la ciudad. También destaca la presencia de mobiliario rescatado de mercadillos de segunda mano, los considerados muebles vintage. El gris es el color por excelencia, en todas sus tonalidades y texturas, pero también puede predominar el negro o el marrón tanto en pareces como suelos.
